Tener una cafetera limpia no solo es esencial para prolongar su vida útil, sino también para asegurar un café con sabor puro. Muchas personas la usan a diario, pero olvidan que, con el tiempo, la cafetera acumula residuos.
El mantenimiento frecuente de la cafetera es clave para disfrutar de un buen café. Cuando no se limpia con regularidad, estos restos alteran el sabor del café y pueden obstruir los conductos de la cafetera, reduciendo su eficiencia o dañándola.
Una buena rutina de limpieza combina el enjuague diario con una desinfección profunda al menos una vez al mes. Para lograrlo sin complicaciones ni químicos agresivos, basta con ingredientes comunes como el vinagre blanco.
En la limpieza diaria, enjuagar bien las piezas desmontables de la cafetera, como la jarra y el filtro, y dejarlas secar completamente ayuda a evitar moho y malos olores.
"Dejarlas secar completamente ayuda a evitar moho y malos olores".
Limpieza mensual
En la limpieza profunda mensual, el vinagre es un aliado perfecto. Al mezclarlo con agua e iniciar un ciclo de la cafetera como si se preparara café, se logra desincrustar los depósitos minerales acumulados.
Tras un breve reposo, el ciclo se completa y se enjuaga con agua limpia para eliminar todo rastro de vinagre. Este proceso revitaliza el funcionamiento interno de la cafetera, haciéndola rendir como el primer día.
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