Incorporar ejercicios a la rutina diaria puede parecer una meta difícil de alcanzar cuando el tiempo escasea, pero no es imposible. Afortunadamente, hay formas sencillas y efectivas de mantenerse activo sin necesidad de pisar un gimnasio.
Hoy en día, existen alternativas prácticas para incorporar ejercicios durante la jornada laboral o en los momentos libres del día. Por ejemplo, trabajar de pie o en movimiento es una opción cada vez más popular.
Ya sea utilizando un escritorio elevado o caminando mientras se atienden llamadas, estos pequeños ajustes permiten que el cuerpo no permanezca en reposo total durante horas.
También es posible aprovechar el tiempo social para hacer ejercicios. Reemplazar una reunión tradicional con una caminata al aire libre o una charla en movimiento es una forma eficaz de mantenerse activo sin interrumpir la vida personal.
"Es posible aprovechar el tiempo social para hacer ejercicios".
Estiramientos
Incluso las pausas breves entre actividades pueden transformarse en momentos útiles para realizar estiramientos o ejercicios básicos de fuerza que, aunque breves, impactan positivamente en el cuerpo.
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