El subsecretario de la Secretaría General de la Presidencia, Máximo Pavez, habló acerca de los inconvenientes en el exCongreso que forzaron la sesión de la Convención Constitucional dos veces.
Por falta de condiciones sanitarias y técnicas, la sesión que debió llevarse a cabo ayer se suspendió para hoy que, nuevamente, volvió a postergarse porque no se resolvieron los problemas.
A raíz de esto, el que salió a dar una suerte de explicación sobre lo sucedido no fue el secretario general de Segpres, Francisco Encina, ni tampoco el ministro Juan José Ossa, uno de los más cuestionados ayer. El encargado de esta tarea fue Máximo Pavez, subsecretario del organismo.
“Fue un problema con el proveedor, una intermitencia del servicio”, declaró Pavez.
Sin darle mayores dimensiones a los problemas que impidieron que se lleve a cabo la sesión de la Convención dos días seguidos, Pavez señaló hoy que ya se están “superando todos los errores técnicos” de ayer y que el principal inconveniente fue “un problema con el proveedor, una intermitencia del servicio”.
Asimismo, el subsecretario reconoció que al Poder Ejecutivo le faltó “la inducción a los convencionales” y que también faltaron “pruebas por la premura del tiempo”, pero aseguró que estos aspectos ya se han corregido.
A su vez, Pavez pidió “comprensión” a los convencionales y que no se pongan “ansiosos” porque confía en que todo “va a salir bien”. “Está todo listo. Resulta que ayer tuvimos una causal de fuerza mayor que fue simplemente que no pudimos conectar todas las conexiones y probarlas”, reiteró.
En ese sentido, el subsecretario de Segpres insistió que “todo está en regla”, y que, por lo tanto, las condiciones, ahora sí, están dadas para que se pueda sesionar a partir de mañana.