Las mujeres que son dueñas de una belleza envidiable no siempre la pasan bien. La realidad es que a veces experimentan la mirada de otras mujeres que intentan siempre menospreciarlas o vincularlas siempre en el medio de otras relaciones. En esa línea Andrea Molina, habló con Julio César Rodríguez y no dudó en contar algunas experiencias que le tocaron vivir a lo largo de su vida.
Una mujer muy hermosa y segura de sí es Andrea Molina y al estar presente en "Pero con respeto", contó algunas de las situaciones donde su característica física le jugó en contra. Si bien la exdiputada trató de mantenerse al margen, según dice, lo cierto es que el tiempo fue el que le ayudó a identificar esos momentos incómodos y cómo transitarlos sin sobresaltos.
Ante la pregunta de Julio César Rodríguez de si ella tomaba conciencia de que se llevaba las miradas de los presentes en cada uno de los lugares donde iba, Andrea Molina se sinceró señalando que no tenía idea de que eso pasara, porque lo vivía tan natural que se le hacía imperceptible.
Al ser consultada sobre si le gustaba llamar la atención de las personas, Andrea Molina señala tajante: "Yo creo que sí, pero inconscientemente, porque no estaba tan consciente de lo que estaba haciendo. De hecho, hubo toda una época donde llegaba a los lugares y no cachaba lo que pasaba. Y te lo digo súper en serio", destacó.
“Después caché que, si estaba frente a una pareja, tenía que saludar al caballero y mantener la mirada siempre con la esposa, conversar con la señora, siempre mantener ahí, ahí. Y después muy buenas noches, para no generar ningún tipo de sensación que hiciera que esa persona se sintiera incómoda, que me agarraran mala onda, porque empecé a dar cuenta de cosillas que empecé a manejar después, con el tiempo”, destacó Andrea Molina.