Felipe Izquierdo volvió a sumarse a “El discípulo del chef”, pero esta vez en el equipo rojo de Sergi Arola, después de haber estado la temporada pasada con la polera verde, bajo las órdenes de Ennio Carota, con quien forjó un lazo muy cercano y divertido.
En el último episodio del reality de Chilevisión, los participantes tuvieron el desafío de cocinar comida italiana, y a los rojos no les fue muy bien en sus preparaciones. Sin embargo, Felipe Izquierdo hizo todo lo posible por defender los platos de su escuadra, provocando las risas de su chef y todos los demás.
“¿Por qué te ries solo? ¿Hay algo que te haya dado gracia?”, le preguntó al conductora Emilia Daiber a Sergi Arola, cuando lo vio tentado de la risa. “Algo no, sino todo el día me hace gracia”, respondió el español. “Está pasando por un momento muy malo”, acotó Felipe Izquierdo, haciendo reir a todos.
“Es que miro a Felipe y no me aguanto la risa”, dijo luego Sergi Arola, a lo que el humorista agregó que “a mi mujer le pasa lo mismo”, y ya entonces la situación se fue de las manos y nadie pudo guardar la compostura.
¿Funcionó la estrategia?
Claro, el único que se podía mantener serio era Felipe Izquierdo, que intentó justificar lo que habían cocinado, diciendo que se trataba de “un plato que proviene de la antigua Italia. Toscana antes era Etruria y los etruscos cosechaban muchos tomates y lo hacían apurados, porque estaban en una circunstancia muy compleja”, dijo.
“Me encantó el chiste, me reí mucho, pero este plato no está logrado en absoluto”, le dijo una de las comensales, que le advirtió que probablemente el aceite en el que hicieron la milanesa podría haber estado quemado. Finalmente, a pesar de los esfuerzos de Felipe Izquierdo, el rojo perdió el desafío.