Bombo Fica contó por primera vez la increíble historia que le tocó vivir en México, en el momento más complejo de la pandemia de COVID, cuando se contagió y pensó que perdería la vida. De hecho, el humorista afirmó que hizo todos los arreglos por si no sobrevivía, y hasta llegó a sentir que era el final.
Según contó Bombo Fica en su paso por “Podemos Hablar”, sucedió a finales del 2020, cuando viajó junto a su familia a pasar el Año Nuevo en México. Al intentar regresar a Chile, dio positivo del famoso virus, por lo que quedó aislado en la habitación de hotel, mientras que toda su familia sí pudo viajar.
“Los primeros días no pasaba nada. El día quinto empecé a tener fiebre”, contó el comediante. “El octavo día empecé con problemas, ya tenía 39, me dolía el cuerpo, me sentía bien malito. Viene el médico y me dice ‘estamos en el peak. Pero ya mañana va a ser distinto. Quédese tranquilo’”, recordó Bombo Fica.
Pero asegura que al día siguiente estaba peor, y ya tenía dificultades para respirar. “El médico me dijo ‘lo vamos a llevar, lo tengo que internar porque lo vamos a intubar. Su saturación es muy mala, está grave, me lo tengo que llevar al hospital. Usted está grave’”, le dijo.
Momento de dramatismo
Para colmo, le dijeron que tenía “pocas” posibilidades de sobrevivir. “Sentí que mi vida se apagaba porque respiraba mal, no podía hablar, tenía 40 grados, me tenía que meter a una tina con agua con hielo para bajar la temperatura”, recordó. Sin embargo, no quiso ir al hospital y decidió quedarse en el hotel.
"Sentí que mi vida se apagaba".
Bombo Fica aseguró que no quiso preocupar a su familia, entonces llamó a su mejor amigo. “Le dije que hablara con mi abogado y le explicara todo lo que tenía que hacer. Que me tenían que llevar en cenizas a Chile porque no podían llevar el cuerpo”, entonces se recostó a esperar el final.
En un momento hasta creyó que había perdido la vida y abandonado su cuerpo, pero cuando se dio cuenta de que estaba bien, se escapó del hotel y se fue a la playa. “Estaba sano. El médico no podía creer lo que estaba pasando. Me dijo ‘esto no es normal, usted tendría que haber perdido la vida. Desde ese momento hasta el día hoy le perdí el miedo al adiós definitivo, porque yo dormí con la más fea", cerró.