La polémica no escapa nunca de Juan Cristóbal Guarello y sus innumerables críticas sin filtros a varios rostros de la televisión, la política y también colegas del periodismo deportivo. En este caso, varios comentaristas y relatores cayeron en la crítica tajante. Precisamente, Waldemar Méndez, el comentarista de Canal 13, fue el foco de críticas.
Sin embargo, Claudio Palma fue quien salió en defensa de su compañero Waldemar para dejar en su lugar a Juan Cristóbal Guarello y responder todo sobre las acusaciones que vincularían al exfutbolista, quien es apuntado duramente por "King Kong", con Fernando Felicevich, el tan criticado representante de jugadores y entrenadores. Las versiones apuntan a un supuesto acuerdo económico que vincula a Radio Futuro y buenas críticas hacia los representados por Felicevich.
Toda esta crítica de Juan Cristóbal Guarello, quien dio nombres y apellidos, recibió una pronta respuesta de Claudio Palma, quien dio la cara por su equipo y contestó de forma también polémica: "Ustedes me conocen, yo soy frontal. Pero no voy a permitir en mi programa algo de eso, porque nos pasamos meses buscando auspicios y ninguno fue por este motivo que acusa Guarello".
Esta aclaración viene en vinculación a supuestos arreglos de Waldemar Méndez con Claro, la marca que es auspiciante del programa en Radio Futura. Con la aclaración, todo queda desmentido y Palma mandó varias advertencias más a Juan Cristóbal Guarello: "Si quieres lo hablemos a la cara, porque yo si tengo lo que Guarello no, entonces puedo mirar a mis hijos a la cara con tranquilidad sabiendo que hago y digo la verdad".
"Si quieres lo hablemos a la cara".
La próxima edición de "La Hora de King Kong" seguramente llegue la réplica de estas duras declaraciones que también ponen como alguien temeroso a Juan Cristóbal, ya que, al parecer, Palma tuvo un enfrentamiento en el pasado con el periodista, pero nunca fue cuestionado por esto.
Más detalles
La trama de Fernando Felicevich y vinculaciones económicas para convocatorias de jugadores, buenos comentarios y demás acciones que privarían la libertad de expresión no son cosa nueva, pero estas supuestas uniones con rostros del periodismo sí lo serían.