Don Francisco vivió una terrible experiencia que quiso compartir con todos. En una extensa carta publicada en "El Mercurio", Mario Kreutzberger relató el caos que afrontó en Texas al intentar obtener su medicamento para conciliar el sueño.
Según dio a conocer el conductor Don Francisco, la odisea surgió cuando decidió visitar Texas tras ser invitado al Centro de Rehabilitación Infantil Teletón (CRIT) en San Antonio, a fines de noviembre. En su llegada al hotel, en horas de la noche, el animador se percató que se había olvidado su medicamento en Miami. Lo peor de todo es que tan sólo se vende con receta retenida debido a sus posibles riesgos de abuso y dependencia.
¿Qué le pasó?
Esa noche, Don Francisco sufrió de insomnio. Al otro día, intentó obtener una receta de su médico en Miami, pero no pudo conseguirla porque el especialista no podía autorizar una receta fuera del estado de Florida.
En medio de su desespero por encontrar su inductor del sueño, el famoso Don Francisco realizó una consulta de telemedicina con un médico local en Texas, quien emitió la receta y la envió a una farmacia local. Aunque el problema parecía haberse resuelto, no fue así, ya que las restricciones de recetas retenidas entre estados obstaculizaron la entrega del medicamento.
Finalmente, el presentador de televisión obtuvo un medicamento alternativo llamado "Ambien" y otro inductor del sueño que no requería receta. Sin embargo, ante todo el drama que sufrió, Don Francisco se vio en la obligación de plasmar su vivencia para encontrar soluciones más accesibles para los viajeros en situaciones similares.
"¿Algo anda mal o soy yo el equivocado?".
"No sé ustedes, pero pienso sinceramente que 'aquí algo anda mal'. ¿Qué pasa en casos como el mío? A todos los que viajamos nos puede pasar que por cualquier razón tenemos que quedarnos más tiempo del planificado en un lugar lejos de nuestra casa, ciudad o país, y nos falta la dosis de algún medicamento con receta retenida, imprescindible para manejar dolores o inducir el sueño", expresó Mario Kreutzberger. "¿Algo anda mal o soy yo el equivocado? Si nadie me responde tendré que asociarme a la célebre frase del Chapulín Colorado: '¿Y ahora, quién podrá defendernos?'", cerró en su relato.