Karen Doggenweiler, antes de sumarse a las filas de Mega, supo brillar en TVN al mando de "Buen finde", donde compartía pantalla con Mauricio Pinilla, Gino Costa y Paulina Alvarado. Estos dos últimos periodistas, cabe recordar, quedaron al mando del matinal de los fines de semana una vez que la actual presentadora de "Mucho gusto" saltó a Bethia. Sin embargo, el ciclo terminó siendo retirado del aire y, tras un sentido posteo referido a su salud mental, Alvarado rompió el silencio sobre su presente.
"Mucho se habla de salud mental, ¿pero realmente sabemos de qué hablamos? Dicen que hay ciertas cosas en la vida que hay que vivir en primera persona para entenderlas. Esta es una de ellas y me pasó a mí. Es por eso que reabrí mis redes, para compartir con ustedes un aprendizaje de vida: no se echen todo en la espalda, no hagan vista gorda de sus emociones, no es necesario ser súper mujeres o súper hombres si eso luego nos traerá consecuencias". Este fue parte del inesperado mensaje compartido hace ya unos días en redes por la excompañera de Karen Doggenweiler.
Poco después, la comunicadora sumó aún más detalles sobre su situación. En diálogo con "Página 7", se ratificó que Paulina desapareció por un mes de Televisión Nacional y de la esfera social debido a una licencia psiquiátrica. "Es difícil, muchas veces, que una acceda a tomarse la licencia porque hay un estigma con el tema de la salud mental", partió declarando no sin antes reconocer que fue "necesario" tomarse un respiro para reconectar consigo misma.
Explicó que el 2022 fue un año repleto de intensidad y que, tanta carga, terminó afectándola de lleno. Se presume que su llegada a "Buen finde", la salida de Karen Doggeneriler del mañanero, su posterior ubicación en la conducción y el final de ciclo podría haber tenido que ver con lo relatado. "Una intenta ser una heroína y eso te pasa la cuenta", reflexionó con inteligencia. El estrés se hizo presente en su día a día. Su cuerpo comenzó a resentirlo y no dudó en afirmar que atravesó "crisis de pánico y de angustia". Fue en ese momento que consultó con un psiquiatra, quien le recomendó alejarse un poco de las presiones que la tenían a mal traer.
La otrora colega de Karen Doggenweiler apostó por su bienestar y, con ayuda de su compañero de vida, consiguió "volver al eje". Tomó la decisión de quedarse en su casa para poder volver a ser ella misma. "Cuando uno tiene un problema de depresión u otro trastorno, cada día es distinto y una tiene que ir escuchándose", explicó en otro tramo de su conversación con "Página 7". La calma del hogar, sus libros y sus mascotas se convirtieron en el refugio ideal para lograr el cometido.
"Cuando uno tiene un problema de depresión u otro trastorno, cada día es distinto y una tiene que ir escuchándose".
Remarcó que desde hacía años que no se detenía y que le resultó harto necesario entablar conversaciones honestas consigo misma. Ahora, recompuesta, ha vuelto a la escena mediática de la mano del programa "Carmen Gloria a tu servicio". Ha retomado su agitada agenda laboral, pero con otro semblante. Sabe que la depresión o los episodios angustiosos pueden estar a la vuelta de la esquina y considera indispensable que cada uno se haga un lugar para escuchar cuáles son los verdaderos valores, motivaciones y objetivos que se tienen con tal de no hundirse en la vorágine de la cotidianeidad.
Una voz necesaria
Gracias a su licencia, la que fuera 'partner' de Karen Doggenweiler ha vuelto a escuchar lo que le comunica su cuerpo; a prestarle atención a aquello que la aqueja y a poner sus necesidades como protagonistas absolutos. Sabe que aún le queda mucho camino por recorrer para conocerse a fondo. De hecho, continúa viendo a una psicóloga. Para cerrar, volvió a soltar una necesaria reflexión sobre la salud mental al subrayar la importancia de dejar de "estigmatizar la depresión". Es que, de la tristeza, al igual que de la alegría, mucho puede aprenderse.