En “La Divina Comida”, Ignacio Achurra no ha querido ser menos y comentó todo lo que vivió durante su experiencia como constituyente. En la mesa, el dramaturgo compartió su historia con Mayte Rodríguez, María Jesús Sothers y Connie Achurra.
De acuerdo a lo que ha comentado Ignacio Achurra, el hecho de trabajar en la Nueva Constitución fue una de las experiencias más intensas y significativas de su vida. “Yo creo que lo duro fue, por un lado, un grupo de cierta derecha que no quería el proceso y quería sabotearlo desde el día uno”, declaró.
“Por otro lado, desde la izquierda, también un sector muy herido por la historia del país y que costaba mucho llegar a acuerdos y eso yo creo que nos hizo a ratos pasarlo muy mal”, destacó Ignacio Achurra. “Trabajábamos de lunes a domingo, mi primera reunión era a las 7 de la mañana, y las últimas reuniones del día empezaban a las 11 de la noche, dormía tres o cuatro horas al día”, rememoró.
"Dormía tres o cuatro horas al día”.
Tiempos difíciles
El hecho de tener tanto trabajo en ese tiempo le privó de pasar momentos con sus seres queridos. “Cuando terminó la convención y empecé a reconectarme con mis hijos, me di cuenta de la deuda que tenía con ellos y con mi familia. Fue súper ‘heavy’”, reconoció el actor.
A su vez, Ignacio Achurra también recuerda la presión que sintió por ser constituyente con todo lo que eso significa. “Cuando empecé a darme cuenta de que había un cierto riesgo de mi seguridad personal, ahí dije que me hacía cargo de que era un momento demasiado importante en el país, pero no me arrepiento de la experiencia”, afirmó.