Nicolás Jarry venía de tener muy buenas sensaciones en Halle, donde llegó hasta cuartos de final y logró posicionarse entre los 30 mejores tenias del mundo. Sin embargo, todo cambió de una semana a otra. En Eastburne, quedó eliminado en octavos de final, lo que le deja un sabor amargo al representante nacional.
Las pistas de pasto no le sentó muy bien a Nicolás Jarry, que pudo avanzar a segunda ronda por la cancelación de su partido contra Michael Ymer, pero terminó por caer en octavos ante el francés Grégoire Barrére, número 57 de la Asociación de Tenis Profesional (ATP). Este es un duro revés para el chileno, que venía demostrando un gran nivel.
Si bien al principio todo parecía estar muy igualado, el francés pudo aprovechar un mal posicionamiento de “La torre de Santiago” y sacó ventaja, quedándose así con la primera manga. Se trató de una advertencia para el representante nacional, quien tuvo una inmediata reacción.
Esto llevó a Nicolás Jarry a ir en busca del partido y logró conseguir algunos quiebres importantes, lo que hizo tambalear al europeo, que veía con impotencia cómo se le complicaba la tarde en Inglaterra. No obstante, Grégoire sacó a relucir todo su juego intenso y con buenas pelotas, se quedó con el encuentro.
Grégoire sacó a relucir todo su juego intenso y con buenas pelotas, se quedó con el encuentro.
Con la cabeza en Wimbledon
Ahora, Nicolás Jarry debe aceptar este mal paso por tierras inglesas y concentrarse para uno de los torneos más importantes del año: Wimbledon. Este Grand Slam de césped ilusiona a la mejor raqueta chilena del circuito, ya que le permitiría seguir escalando posiciones en el ranking y mantener las buenas sensaciones que viene teniendo en una de sus mejores temporadas de su carrera.