Las legumbres son fuentes de vitaminas, hierro y proteínas, por lo que son fundamentales en la dieta diaria. Si bien todas tienen grandes beneficios, las lentejas ayudan, además, a prevenir la anemia.
La lenteja contiene infinidad de nutrientes claves para la salud. Debido a que no poseen colesterol ni grasas saturadas son fáciles de digerir. Asimismo, tienen un alto contenido de fibra y minerales, y son fuente de fósforo, calcio, magnesio, selenio y hierro, especial para combatir o prevenir la anemia.
¿Qué se sabe?
Expertos en nutrición destacan que las lentejas contienen un 23 por ciento más de proteínas que las alubias o los garbanzos, que ayudan al desarrollo de la masa muscular y facilitan la reparación celular, fortaleciendo así el sistema inmunológico y ayudando a prevenir padecimientos e infecciones, entre ellos la anemia.
Las lentejas contienen un 23 por ciento más de proteínas que las alubias o los garbanzos.
Las lentejas son ricas en hierro, un mineral que mejora el transporte de oxígeno en la sangre, ayudando así a mejorar el rendimiento físico y promover la formación de músculos. Pero, no conforme con eso, por sus excelentes cantidades de hierro que actúa en la producción de hemoglobina, las vuelve grandes aliadas para prevenir la anemia.
Por otra parte, las lentejas aportan ácido fólico, una vitamina que favorece la formación de células sanguíneas, contribuyendo a mantener los niveles de hierro en la sangre.
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