Los espejos son muy delicados y muchas veces, después de asear la casa, quedan con unas manchas incómodas y muy evidentes. Por eso, a la hora de limpiarlos, es necesario tomar recaudos especiales, sobre todo para extender su vida útil. En este artículo compartiremos también algunos trucos para eliminar esas manchas que parecía habían llegado para quedarse.
En primer lugar, es necesario saber que los espejos de cada ambiente son cada uno en sí mismo un universo aparte. No es lo mismo encarar la limpieza del espejo del baño o del espejo de la habitación, ni que hablar de ese viejo espejo de la sala que muestra algunas manchas provenientes de la época de la abuela.
Si bien existen productos que son específicos para limpiar espejos, que sin duda serán la mejor opción, a continuación compartimos algunas recetas para limpiar esos vidrios tan delicados, con elementos que podemos encontrar en la casa.
Manchas de humedad y jabón.
En el caso de los espejos de la habitación, se puede colocar en un balde agua con vinagre blanco y jabón, una vez mezclados estos ingredientes, se aplican con papel de periódico. También se puede reemplazar el vinagre por jugo de limón.
En el caso de los espejos del baño, puede ser más complicado ya que aparecen manchas de humedad o jabón. Para dejarlos impecables se debe utilizar un trapo de microfibra para remover la suciedad de la superficie, y después repasar pero ya humedecido en alcohol, para eliminar las manchas.
Contra las manchas
Por último, en el caso de vidrios manchados por gotas de agua o sustancias similares, se utilizará una mezcla de jabón antigrasa lava platos y vinagre blanco. El mismo debe rociarse sobre la superficie y dejar actuar durante media hora aproximadamente. Luego, se pasa un trapo sobre el espejo para secar.
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