La sal puede ser un ingrediente primordial en la cocina para realzar el sabor de tus preparaciones, pero muchas personas no pueden consumirla o bien deberían reducir la cantidad que consumen día a día. Por ende, esta es la mejor manera de reemplazarla pero sin perder el sabor.
Las comidas con mucha sal o la gente que la consume demasiado puede desencadenar en problemas graves de salud en el futuro. Para evitar esto, pero sin perder el rico sabor de tus preparaciones, hay varias cosas que puedes hacer al respecto.
Cómo reemplazar la sal en las comidas
Comienza a preparar las comidas con la cantidad justa de sal y ve reduciéndola poco a poco. Empieza reemplazándola por cebolla deshidratada, ajo en polvo, pimienta, ají molido u otro tipo de condimentos que pueden ser muy buenos y ricos en tus preparaciones.
También las hojas de romero, albahaca, tomillo o laurel son muy buenas para poner en carnes, pollos u otro tipo de comidas. La sal quedará en el olvido cuando sientas que todas estas especias brindan un sabor único por igual.
También las hojas de romero, albahaca, tomillo o laurel son muy buenas para poner en carnes, pollos u otro tipo de comidas.
También podrías agregar algún tipo de aderezo como mostaza o mayonesa a tus platos, pero en cantidades justas y medidas. Lo ideal es no pasarse con ninguno de ellos y así tener comidas mucho más equilibradas.
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