Es bastante común que, al hacer un viaje en avión, muchos pasajeros sientan dolores en los oídos a causa de los cambios en la presión del aire durante el ascenso y el descenso de la nave. Estos cambios rápidos de altitud producen una sensación dolorosa o de bloqueo.
De acuerdo a lo que se informa en “The Mayor Clinic”, el dolor que se experimenta dentro del avión se denomina barotraumatismo del oído. Este malestar se produce cuando hay un desequilibrio en la presión atmosférica.
Estos síntomas son más frecuentes en niños y en personas con alergias. Para evitar este tipo de problemas, debemos bostezar o tragar durante el ascenso y el descenso del avión para activar los músculos que abren las trompas de Eustaquio. También sirve comer un caramelo o masticar un chicle.
Más tácticas
Es importante mantenerse despierto durante los descensos y ascensos. Así podrías realizar la maniobra de Valsalva, que consiste en soplar suave, como si te sonaras la nariz mientras te la tapas con los dedos y mantienes la boca cerrada. Al repetirla varias veces, se equilibra la presión entre los oídos y el avión.
Si tienes congestión nasal, podrías aplicarte un aerosol nasal de venta libre entre 30 minutos y una hora antes del vuelo. A su vez, mantenerse hidratado es importante, tanto como usar tapones especiales para vuelo, que pueden reducir estas molestias en el avión.
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