Todos quisiéramos poder comunicarnos verbalmente con nuestras mascotas, pero, al no ser esto posible, tenemos que aprender a identificar las señales que nos dan para saber si algo no anda bien y es tiempo de actuar para ir al veterinario.
Las mascotas suelen manifestar tanto el dolor como el estrés de diferentes maneras. Si un can tiene dolores, se podrá evidenciar en sus cambios de postura como bajar la cola, agacharse, encorvar la espalda o dormir muy acurrucado son señales de que algo anda mal.
De acuerdo a lo que ha dado a conocer “Sutuvet”, tenemos que tener en cuenta que la pérdida de peso, vómitos, diarrea o quejido frecuentes puede indicar que las mascotas están teniendo problemas de índole digestivo.
Si un can tiene dolores, se podrá evidenciar en sus cambios de postura.
Otra de las señales a las que debemos estar atentos es cuando a las mascotas les cuesta caminar. Si su respiración es rápida o se agita mucho presentando secreción nasal, sabemos que debemos ir al veterinario indicando que hay problemas respiratorios.
Atento a los cambios
Si se nota cambios o dificultad a la hora de orinar o defecar, pueden existir serios problemas en los riñones o infecciones urinarias que tienen que ser tratadas por un profesional. La misma recomendación corre cuando se notan transformaciones en la piel como erupciones, comezón, resequedad o bultos extraños.
Al mismo tiempo, si tus mascotas presentan dificultades y se quejan a la hora de caminar, podría tratarse de un problema de articulaciones. Algo muy recurrente en canes de edad avanzada. Existen tratamientos que pueden aliviar sus dolores.
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