Pasó el fin de semana y muchos de nosotros aprovechamos para hacer una limpieza profunda en nuestro hogar. Esto implica lavar todos aquellos espacios que solemos dejar de lado en los aseos express que hacemos más seguido. En este marco, el baño, y más precisamente el inodoro, puede ser el principal desafío.
Dejar que pase el tiempo sin limpiar en profundidad el inodoro, puede generar manchas que luego se hacen muy difícil de quitar. Para esto, existen muchos productos de limpieza con bastantes químicos, aunque estos puede llegar a ser muy costosos. Por suerte, existen algunos trucos caseros que pueden ayudarte con la limpieza, sin gastar de más.
En esta oportunidad, compartiremos contigo un secreto muy utilizado por nuestros abuelos, que dejará este espacio de tu hogar reluciente. Se trata de una mezcla infalible de dos ingredientes: bicarbonato de sodio y vinagre, con los que podrás quitarle el sarro y esas manchas amarillentas que tanto se ven.
Se trata de una mezcla infalible de dos ingredientes: bicarbonato de sodio y vinagre.
Dicha composición crea una reacción efervescente que ayuda a descomponer las suciedades difíciles. Simplemente, espolvorea bicarbonato de sodio en la taza del inodoro, rocía con vinagre y deja actuar durante unos minutos antes de fregar con una escobilla.
Limpieza regular del inodoro
Para la limpieza diaria del inodoro, existe otro método, el cual te permite mantenerlo limpio a lo largo del tiempo. En este caso, utilizaremos una solución de agua oxigenada y detergente líquido, rocía alrededor y deja actuar. Esto proporcionará una desinfección efectiva y dejará un aroma agradable.
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