Lavar ropa delicada no solo requiere atención, sino también la elección adecuada de técnicas y productos para prolongar la vida útil de esas prendas especiales que tanto valoramos. Si bien muchas personas confían plenamente en la lavadora para todo tipo de tejidos, la verdad es que no todos resisten la misma intensidad de lavado.
El primer paso para lavar la ropa delicada es conocer el tipo de tejido que vamos a tratar. Se recomienda revisar las etiquetas de cada prenda ya que, por lo general, dan información valiosa como la composición del material, la temperatura ideal del agua y si es posible o no utilizar lavadora.
Quienes prefieran utilizar la lavadora para lavar la ropa delicada, deben considerar ciertos cuidados: abrochar botones y cerrar cremalleras, voltear las prendas del revés, y reducir la carga del tambor a un tercio de su capacidad. Además, es aconsejable elegir un ciclo de lavado corto con agua fría y sin centrifugado.
Por otro lado, el lavado a mano sigue siendo la mejor técnica para cuidar la ropa delicada. Solo necesitamos sumergirlas en agua fría con una pequeña cantidad de detergente suave, frotar con suavidad en caso de manchas y enjuagar bien sin retorcerlas. Para eliminar el exceso de agua, se recomienda colocarlas sobre una toalla y presionar ligeramente.
"El lavado a mano sigue siendo la mejor técnica para cuidar la ropa delicada".
El secado
El secado también es una etapa crucial. La secadora no es la mejor opción para la ropa delicada, ya que el calor puede dañarlos. Del mismo modo, colgarlas mojadas con pinzas puede provocar deformaciones o marcas permanentes. Lo recomendable es secarlas en posición horizontal sobre una toalla limpia, lejos del sol directo si la etiqueta no indica lo contrario.
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