Como es sabido, hace algunos días el denominado conflicto mapuche volvió a tener una nueva escalada luego de que trascendiera el deceso de un comunero perteneciente al pueblo indígena, luego de un operativo de seguridad llevado a cabo en el centro sur de Chile. A raíz de esto, la ONU manifestó su preocupación el pasado viernes.
La Oficina para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) de la ONU, con sede en Santiago, manifestó su preocupación por esta escalada en el conflicto e instó a las autoridades locales que se lleve a cabo una investigación "rápida, exhaustiva, rigurosa y eficaz" de lo sucedido.
A partir de este episodio ocurrido el miércoles, en donde a un joven de 23 años, Jordan Llempi, le quitaron la vida en el marco de controles vehiculares llevados a cabo por las fuerzas militares y policiales, la Oficina Regional de DDHH de la ONU le recordó al Gobierno que el uso de la fuerza armada solamente debe ser implementada en casos excepcionales.
"Es una medida extrema a la que solo se debe recurrir cuando sea estrictamente necesario para proteger una vida o evitar lesiones de gravedad frente a una amenaza real e inminente", expresó la oficina de la organización internacional a la vez que manifestó su preocupación por el estado de excepción decretado por Sebastián Piñera y que se prolongará, en principio, hasta el 11 de noviembre.
El llamado de atención al Gobierno
Asimismo, Jan Jarab, representante de la oficina para América del Sur del ACNUDH, remarcó: "Aún cuando el uso de la fuerza sea legítimo para reestablecer el orden público, deberá ajustarse a los principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad, rendición de cuentas, precaución y no discriminación".
Finalmente, la oficina de la ONU condenó la escalada del conflicto y de los diferentes episodios en el sur de Chile e instó a las autoridades y los demás actores a establecer un canal de diálogo en un marco pacífico para, de esa manera, poder llegar a un acuerdo.