El presidente de Corea del Norte, King Jong un, se ha caracterizado por mantener una dictadura comunista a lo largo de su período como mandatario nacional del país asiático. A 10 años de su llegada al poder, el líder ha impulsado una serie de medidas que impiden cualquier tipo de festejos.
De acuerdo a la orden dictada por King Jong un que tiene sorprendido al mundo entero, nadie en Corea del Norte puede celebrar por ningún motivo porque en estas fechas, además de celebrarse su arribo al poder también recuerda el décimo aniversario de la partida física de su padre, Kim Jong il.
Esta sentida pérdida implica un duelo generalizado en Corea del Norte, a tal punto que las autoridades de ese país ordenaron a la ciudadanía no mostrar ningún tipo de felicidad o alegría en el período de luto. Fuentes norcoreanas informaron a la Radio Free Asia (RFA) que, a raíz del mandato de King Jong un, las personas tienen prohibido reír, ingerir ciertas bebidas o desarrollar actividades de ocio que denoten festejo o esparcimiento.
Dura realidad
Los períodos de duelo en Corea del Norte duran una semana, pero al cumplirse 10 años de la partida del padre de King Jong un, este plazo se extendió hasta 11 días.
La RFA también señaló que este viernes los ciudadanos de Corea del Norte no pueden ni siquiera ir de compras y para controlar que todo se cumpla al pie de la letra, los agentes de seguridad vigilarán a las personas que no se muestren debidamente afectadas por el luto. Años atrás, muchas personas que eran sorprendidas bebiendo o intoxicadas durante un periodo de luto eran arrestadas. Sin embargo, se desconoce si este tipo de actos se siguen cometiendo en la actualidad.