Una nueva ola de COVID afecta a las principales ciudades del mundo, y esto se puede percibir principalmente en los miles de vuelos que han sido cancelados, principalmente en Europa y Estados Unidos.
En el último fin de semana de Navidad, por lo menos 8300 conexiones aéreas internacionales y domésticas fueron anuladas, mientras que muchísimos vuelos no salieron a tiempo entre el viernes y el domingo.
Los datos fueron publicados por el sitio Flightware, que advirtió además que se produjeron retrasos en todo el mundo, debido al avance de la cepa Ómicron de COVID. En Francia, se espera que se anuncien nuevas restricciones debido al exponencial crecimiento de contagios.
Este lunes, fueron cancelados 2305 vuelos, mientras que más de 5660 tuvieron demoras, según el mencionado portal. Gran parte de estos contratiempos están relacionados con viajes desde, hacia y dentro de Estados Unidos, que experimentó 801 anulados y 1284 retrasados en lo que va de la jornada.
Para Año Nuevo la situación no parece mejorar, ya que la proyección para el resto de la semana no es para nada alentadora. Ya se confirmaron 790 cancelaciones aéreas para este martes y 46 demoras, y para el miércoles 186 vuelos cancelados y 3 demorados hasta el momento.
Compañías como Lufthansa, Delta, United Airlines, Alaska Airlines, JetBlue o British Airways fueron las más afectadas debido a la alta cantidad de pilotos y tripulación que han dado de positivo de COVID.
Estados Unidos el más afectado
"El pico de casos de Ómicron esta semana a través del país (en referencia a Estados Unidos) tuvo un impacto directo en nuestras tripulaciones y las personas que gestionan las operaciones", aseguraron en un comunicado desde United Airlines.
Otro factor que influyó en la cancelación de los vuelos ha sido el clima. En la región oeste de Estados Unidos se han registrado intensas nevadas y tormentas, que impidieron numerosos despegues.