Durante los últimos años, el cambio del clima provocó una larga lista de terribles incendios al rededor de todo el mundo. Debido a la enorme cantidad de incendios forestales que afectan al planeta, los científicos estudian cómo impacta en el clima.
El equipo de estudiosos Geophysical Research Letters comenzó a investigar los incendios forestales en 2018 durante una larga temporada en el oeste de Estados Unidos que resultó ser la peor del país.
En una entrevista con National Geographic comentaron que en su investigación descubrieron que "las partículas de humo hacen que algunas nubes sean más densas y más compactas con gotitas diminutas, una combinación que significa que es menos probable que el agua en ellas caiga en forma de lluvia".
La disminución de precipitaciones en aquellas zonas áridas sería una especie de incentivo para los incendios zombie. Estos son llamados así debido a que el fuego se produce debajo de la capa del suelo. El incendio es alimentado por suelos ricos en combustible y subsiste con el escaso oxígeno disponible.
Además, la poca cantidad de lluvias también ayudaría a que las sequías continúen en las zonas cercanas a los incendios.
"Cuando las gotas de las nubes son demasiado pequeñas, a veces no llueve", explicó a National Geographic un científico atmosférico del Laboratorio de Propulsión a Chorro de California.
Algunas de las zonas afectadas son: el sur de África, el Amazonas, Indonesia, Grecia, Turquía y Estados Unidos, aunque podrían sumarse cientos de otros lugares en el futuro cercano.