Tras la llegada de los 13 mil migrantes que cruzaron la frontera hacia Estados Unidos y se ubicaron en Texas, Del Rio, el presidente Joe Biden emitió un mensaje al respecto.
Si bien hasta el día sábado 18 de septiembre el mandatario americano no había hablado sobre lo que estaba pasando en Texas, debido a la gran oleada de personas que llegaron a Estados Unidos buscando un refugio, tuvo que dar un mensaje para calmar a las masas.
La administración de Joe Biden expresó recientemente que sus "fronteras no están abiertas y que la gente no debe hacer el peligroso viaje".
Los 13 mil inmigrantes, quienes provienen en su mayoría de Haití, continúan durmiendo en un campamento improvisado que armaron debajo de un puente en el cruce de Del Río, Texas y Ciudad Acuña, México. Los migrantes se encuentran retenidos por las autoridades migratorias.
En este contexto, el alcalde de Del Río, Bruno Lozano, pidió que no se deportaran a los migrantes debido al contexto del COVID, ya que la mayoría de los recién llegados no tienen una base en donde quedarse legalmente.
Por su parte, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos informó en un comunicado que "para acelerar el ritmo y aumentar la capacidad de los vuelos de deportación a Haití y otros destinos en el hemisferio dentro de las próximas 72 horas".
El Departamento de Inmigración de Estados Unidos explicó que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza y la Guardia Costera se organizaron para poder trasladar a personas que están acampando en Del Río a otros pasos de entrada al país para evitar que haya tantas personas juntas.