Europa entró en alerta luego que desde Rusia informaran la suspensión del envío de gas por un "mantenimiento rutinario". En un comunicado, el gasoducto Nord Stream 1, clave para el suministro de gas hacia el centro del viejo continente, dio a conocer que no funcionará entre el 31 de agosto y el 2 de septiembre.
La compañía gasística rusa Gazprom explicó que la única estación de bombeo que sigue activa se detendrá temporalmente y que, una vez concluidos los trabajos de mantenimiento, el flujo de gas a Europa se retomará a un nivel de 33 millones de metros cúbicos diarios.
¿Estrategia rusa?
"En correspondencia con la documentación técnica de la compañía Siemens, cada 1.000 horas es necesario llevar a cabo un mantenimiento técnico del equipo que incluye la revisión del chasis para detectar fisuras, deformaciones, manchas de quemaduras", expresó Gazprom.
Apenas concluyan las labores de mantenimiento, desde el gigante ruso enfatizaron que el bombeo de gas será restablecido hasta el nivel previo al cese de las operaciones, de 33 millones de metros cúbicos diarios. Sin embargo, desde Europa están esperando para ver si esto es cierto.
Rusia ha ido reduciendo paulatinamente el bombeo por el Nord Stream hacia Europa.
Rusia ha ido reduciendo paulatinamente el bombeo por el Nord Stream hacia Europa, con la excusa de problemas técnicos y la necesidad de reparar las turbinas Siemens del gasoducto.