El papa Francisco expresó preocupación y angustia por la situación en Nicaragua, por lo que pidió "un diálogo abierto y sincero" con el fin que "se puedan encontrar la bases para una convivencia respetuosa y pacifica".
Este domingo, al final del rezo del ángelus en la Plaza de San Pedro, el papa Francisco se refirió al complicado panorama que se respira en Nicaragua, pero no hizo mención al arresto del obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez, por parte de la policía de ese país.
"Sigo con cercanía, con preocupación y dolor la situación que se ha creado en Nicaragua que afecta a personas e instituciones. Quisiera expresar mi convicción y mi deseo de que por medio de un dialogo abierto y sincero se pueden encontrar la bases para una convivencia respetuosa y pacifica", destacó el sumo pontífice.
"Sigo con cercanía, con preocupación y dolor la situación que se ha creado en Nicaragua".
Fuente: (Twitter de papa Francisco).
En esa misma línea, el papa Francisco también pidió al Señor que "por la intercesión que la Purísima (como se conoce a la Virgen en Nicaragua) inspire en los corazones de todas las partes tal concreta voluntad".
Las palabras del papa Francisco surgen poco después de la captura del religioso Rolando Álvarez y otros tres sacerdotes, hechos que dejan entrever los tensos vínculos que mantiene la Iglesia católica nicaragüense y los sandinistas encabezados por el presidente Daniel Ortega.