Alemania es tendencia en el mundo. Esta semana, el país europeo estrenó una línea ferroviaria que funcionará íntegramente a base de hidrógeno, como avance para descarbonizar el transporte por ferrocarril y reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera.
La nueva flota ferroviaria de Alemania consta de 14 trenes vendidos por el grupo francés Alstom a la región de Baja Sajonia (norte), y llega para remplazar las actuales locomotoras diésel que cubren los 100 kilómetros de la línea que conecta las ciudades de Cuxhaven, Bremerhaven, Bremervörde y Buxtehud, cerca de Hamburgo.
¡Objetivos claros!
Los trenes de hidrógeno buscan disminuir las emisiones de CO2 y reemplazar el diésel, que según las estadísticas, todavía sigue alimentando el 20% de los trayectos por ferrocarril en Alemania.
De acuerdo a los informes, los trenes de Alstom combinan hidrógeno almacenado a bordo con el oxígeno presente en el aire. Esto es posible por una pila de combustible que produce la electricidad necesaria para asegurar la tracción del convoy.
La nueva flota de trenes en Alemania costó 93 millones de euros.
La nueva flota de trenes en Alemania costó 93 millones de euros y el objetivo inicial es evitar generar "4.400 toneladas de CO2 cada año", según la LNVG, que opera la red a nivel regional. Asimismo, se conoció que Alstom ha firmado ya cuatro contratos para entregar decenas de trenes en Alemania, Francia e Italia.