Fueron miles las personas que se acercaron este sábado a la Casa de los Sindicatos de Moscú para darle la despedida final al último líder de la Unión Soviética, Mijail Gorbachov. El destacado político ruso perdió la vida el pasado 30 de agosto luego de atravesar un padecimiento grave y prolongado.
Lo curioso del caso es que Vladimir Putin, presidente ruso, no hizo acto de presencia en el funeral. En añadidura, no hubo ni siquiera un luto nacional en el último adiós a Gorbachov, al cual si asistieron figuras diplomáticas de Occidente.
El Kremlin alegó problemas de agenda como justificación a su ausencia en los homenajes a Gorbachov. El único acto de Putin hacia el ganador del Premio Nobel de la Paz en 1990 fue un ramo de flores en el féretro del exdirigente soviético el pasado miércoles.
El Kremlin alegó problemas de agenda como justificación a su ausencia en los homenajes a Gorbachov.
Fue la Fundación Gorbachov quien informó que el acto que se llevó a cabo en las últimas horas sería abierto al público. Para sorpresa de muchos, fueron miles quienes se acercaron a las inmediaciones de la Casa de los Sindicatos para acceder al lugar en donde descansaron los restos del exmandatario.
Presencia internacional
De acuerdo a “The Moscow Times”, la presencia más representativa en la despedida de Gorbachov fue la del vicepresidente del Consejo de Seguridad, Dimitri Medvedev. Los embajadores de los Estados Unidos, Reino Unido y Alemania, así como el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, fueron quienes se destacaron con su presencia en el lugar.