China abrió por primera vez sus fronteras este domingo tras casi tres años de aislamiento, enterrando su política COVID Cero que se creó para controlar a sus habitantes con duros confinamientos, cuarentenas y pruebas masivas.
Desde marzo de 2020, todas las personas que entraban a China debían aislarse en instalaciones controladas por el Gobierno, primero por un plazo de tres semanas que, posteriormente, se redujo a una semana en el verano boreal y a cinco días en noviembre de 2022. Ahora, los pasajeros que lleguen al país asiático no deberán cumplir cuarentena obligatoria.
¡Preocupación mundial!
Apenas se anunció el fin de esta medida, los chinos se apresuraron a comprar viajes al extranjero. Sin embargo, en medio de los rebrotes de contagios de COVID en China y ante la apertura de la frontera, numerosos países están imponiendo test obligatorios a los chinos para evitar contagios masivos.
Numerosos países están imponiendo test obligatorios a los chinos.
Por supuesto, el hecho que el Gobierno de Xi Jinping haya abierto sus fronteras causa preocupación en el mundo entero, incluso a la Organización Mundial de la Salud (OMS), teniendo en cuenta que China está afrontando su peor brote epidémico hasta la fecha.
Sin embargo, el presidente de China calificó de "inaceptables" las restricciones impuestas por Estados Unidos, Japón o países de la Unión Europea (UE), pero al mismo tiempo mantiene la exigencia de test de COVID a los pasajeros entrantes y sigue bloqueando en gran medida a turistas y estudiantes internacionales.