Nápoles está viviendo un tenso momento a raíz de un nuevo terremoto de magnitud 4.0, que se produjo la noche del lunes en la zona de los Campi Flegrei, el cual fue advertido por la población aunque no se han producido daños importantes.
El movimiento telúrico ha hecho que crezca la preocupación en Nápoles al intensificarse la actividad del llamado bradisismo, que podría ser preludio de una erupción, aunque los expertos la descartan.
¿Qué se sabe?
La zona en torno al volcán Campi Flegrei en Nápoles ha sido escenario en los últimos días de una creciente actividad sísmica con una serie de temblores. El lunes 2 de octubre, el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) confirmó otro temblor de magnitud 4.0 a las 22.08 horas (20.08 GMT), a una profundidad de 3 kilómetros.
El terremoto se sintió en toda la ciudad de Nápoles, pero sobre todo en los municipios cercanos como Pozzuoli y Agnano, donde varias familias pasaron la noche fuera de sus casas por el miedo.
"Es necesario gestionar el miedo y realizar todos los controles necesarios".
En medio de la angustia que se vive en Nápoles, el director del Observatorio Vesubiano, Mauro Di Vito, explicó que "la actividad sísmica continúa y continuará. No hay ninguna duda. Es necesario gestionar el miedo y realizar todos los controles necesarios". Asimismo, advirtió que "es posible que se produzcan temblores de mayor intensidad".