Un volcán entró en erupción en el suroeste de Islandia, cerca de la capital Reikiavik, lanzando por los aires roca semifundida. La oficina meteorológica de ese país dio a conocer el suceso, el cual comenzó alrededor de las 22.17 horas del lunes, tras un serie de pequeños sismos.
"Una erupción comenzó en la península de Reykjanes", dijo el organismo de Islandia en su cuenta X, anteriormente Twitter. "Puede ser observada en webcams y parece estar situada cerca de Hagafell", agregó refiriéndose a un poblado al sur de la capital.
¿Qué se sabe?
Islandia se ubica en una zona de gran actividad volcánica en el Atlántico norte y promedia una erupción cada cuatro o cinco años. Sin embargo, lo recientemente sucedido no se esperaba, mucho menos que la erupción en la península de Reykjanes, unos 50 kilómetros al suroeste de la capital, Reikiavik, liberase cenizas.
De acuerdo a los informes provenientes de Islandia, la longitud estimada de la fisura es de unos 3,5 kilómetros, considerablemente superior al de anteriores erupciones, mientras que la velocidad del flujo de lava es de entre 100 y 200 metros cúbicos por segundo, lo que supone también un notable incremento en comparación con otras erupciones ocurridas en la península durante los últimos años.
La velocidad del flujo de lava es de entre 100 y 200 metros cúbicos por segundo.
A las 3.00 hora local, la oficina meteorológica de Islandia informó que la intensidad de la erupción del volcán se estabilizó y que "la actividad está disminuyendo", sin precisar cuánto puede durar. "Esperemos a ver qué nos deparan las fuerzas de la naturaleza", apuntó el presidente Gudni Thorlacius Jóhannesson en la red social X.