Donald Trump asumirá en pocos días como presidente de los Estados Unidos. Mientras tanto, inició una fuerte polémica con el actual mandatario norteamericano, con uno de los emblemas del primer mandato del republicano, como lo fue la construcción del muro para impedir la inmigración ilegal desde México.
Todo comenzó a partir de la noticia que indicaba que la administración actual estaba vendiendo materiales pertenecientes al polémico muro fronterizo con México. Donald Trump calificó este hecho como un acto “casi ciminal”. También, prometió retomar la construcción de la famosa pared en su segunda presidencia.
“Pido a Joe Biden frenar la venta del muro”, partió diciendo Donald Trump en su conferencia del lunes desde Mar a Lago. “Es un material muy costoso y hoy su precio debe ser el doble de lo que era hace seis años y la Administración lo está rematando por cinco centavos cuando saben que nos estamos preparando”, dijo el presidente electo.
Voces en contra
Dan Patrick, el vicegobernador de Texas, se refirió también a la subasta que lleva adelante la actual administración. “Es básicamente un montón de chatarra. Está llena de óxido y con algo de concreto. Hay algunos paneles que pueden ser salvados, pero quizá es demasiado caro traerlos desde Arizona”, opinó.
“Es básicamente un montón de chatarra".
Según el Pentágono los paneles ofrecidos en las subastas “ya no son propiedad del Gobierno de Estados Unidos” por lo que no tienen autoridad legal para reclamarlos de vuelta o frenar la venta de un producto que ya no forma parte del catálogo de la Administración.
Desde el sector que acompaña al futuro presidente Donald Trump sostienen que aún existen medidas que se pueden tomar para recuperar estos materiales, que forman parte de una de las propuestas más polémicas y la que más resonó alrededor del mundo cuando se dio a conocer.
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