El mundo entero quedó paralizado ante la ofensiva que lanzó este fin de semana Irán en contra de Israel. Esto puso en alerta a toda la región y obligó a que tanto el G7 como la Organización de las Naciones unidas, convoquen a una reunión urgente para evaluar lo ocurrido y evitar consecuencias de gravedad.
Más de 200 drones y misiles fueron enviados desde Irán contra Israel, en respuesta a un ataque previo contra el consulado en Damasco el 1 de abril. Desde la nación asiática afirman que no seguirán con las hostilidades ya que alcanzaron sus objetivos, mientras que desde Europa sostienen que los sistemas de defensa funcionaron correctamente.
De todos modos, los jefes de Estado y de gobierno que conforman el G7 fueron convocados a una videoconferencia "para hablar sobre el ataque de Irán contra Israel", según anunció el gobierno italiano, que actualmente preside el grupo de principales potencias occidentales.
"La presidencia italiana del G7 convocó hoy, a primera hora de la tarde, una videoconferencia de líderes", dice el comunicado dado a conocer desde el Gobierno de Italia. Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Francia, Alemania y Japón terminan de conformar esta liga de países.
"Un conflicto aún mayor".
El Consejo de Seguridad de la ONU también tendrá su encuentro por este mismo asunto. El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ya salió a condenar "una grave escalada" cuyas imágenes recorren el mundo.
El pedido del Papa
Por su parte, el Papa Francisco lanzó este domingo un "llamado urgente" contra "una espiral de violencia" susceptible de "arrastrar a Medio Oriente a un conflicto aún mayor", tras lo sucedido en Israel e Irán. "Sigo con oraciones y con preocupación, pero también con dolor, las noticias de las últimas horas”, dijo el religioso.
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