Los Juegos Olímpicos de París 2024 dejaron grandes imágenes, tanto en lo deportivo, como por la impactante inauguración. Pero también perdurará una postal lamentable, que es la de los deportistas descompuestos luego de haber nadado por las aguas contaminadas del río Sena.
Por allí navegaron, bajo una fuerte lluvia, las delegaciones de los países participantes en el día de la inauguración. Fueron justamente esas precipitaciones, las que alteraron la composición de las aguas y obligaron a suspender las pruebas que iban a llevarse a cabo allí, como otra de las apuestas fuertes de París 2024.
"Tras una reunión sobre la calidad del agua celebrada el 31 de julio a las 3:30 a.m. a la que asistieron París 2024, representantes del Triatlón Mundial y sus Delegados Técnicos y Médicos, Météo France, la Ciudad de París y la Prefectura de la Región de Île de France implicados en la realización de pruebas de calidad del agua, las partes interesadas han confirmado que los triatlones femenino y masculino seguirán adelante como estaba previsto el 31 de julio a las 8 a.m. y 10:45 a.m. respectivamente", dijeron en un comunicado desde París 2024 y el Triatlón Mundial.
Quejas de los deportistas
Así fue como los atletas finalmente saltaron a las aguas del Sena. "La calidad del agua era muy discutible, nos han tratado como payasos. Si se hubiera pensado en la salud de los atletas no se habría hecho aquí. Es una pena. Debemos decirlo y no podemos quedarnos callado. Es una pena que no se piense en el atleta", comentó la deportista española Miriam Casillas.
"Durante la competición no notamos nada, será en la noche, mañana o en los próximos días cuando veremos si tenemos consecuencias o no por nadar en el río. Y eso es un problema, porque el día 5 tenemos el triatlón mixto", agregó la atleta, que terminó en el puesto número 33.
Lo cierto es que está prohibido nadar en el Sena desde hace más de 100 años, sin embargo, los organizadores de los Juegos Olímpicos de París 2024 elaboraron un plan para limpiar el río y que los mejores atletas del mundo pudieran utilizarlo.
La inversión se elevó hasta los 1.500 millones de dólares paa limpiar el río. Incluso, la propia alcaldesa de París, Anne Hidalgo, nadó allí para mostrar su confianza en la calidad del agua del Sena y prometió poner una piscina en el río después de los Juegos. Lo propio hizo el Ministro de Deportes de Francia.
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