Rosangela da Silva, más conocida como Janja, es la esposa del presidente de Brasil, Lula da Silva. Janja ha llamado poderosamente la atención de todos al intervenir en una cena oficial en Beijing, lo que causó una fuerte controversia en el país vecino.
Janja tomó la palabra sin estar prevista para hablar en el acto oficial y criticó el supuesto sesgo de TikTok, que favorecería contenido de derecha para adolescentes. La intervención de la esposa de Lula da Silva generó incomodidad. Incluso, la Primera Dama china, Peng Liyuan, sostuvo que se trató de una falta de respeto para Xi Jinping.
“Parece que Brasil es gobernado por una pareja”, indicó Beatriz Rey, politóloga y académica perteneciente a la Universidad de Lisboa. “Cuando dice que no habrá protocolos para silenciarla, está deslegitimando nuestras instituciones democráticas. No tiene un cargo electo ni funciones de gobierno. No se trata de género ni feminismo, se trata de una interferencia indebida”, asegura la experta a pocas semanas de la cumbre del BRICS y el G20.
Janja ya intervino en otras ocasiones al expresar su opinión sobre temas sensibles. “No voy a cenas solo para acompañar. Sé muy bien cuáles son mis límites”, indicó la pareja de Lula da Silva al podcast del diario “Folha de Sao Paulo”.
El 36 por ciento de los brasileños asegura que las intervenciones de Janja perjudican al gobierno.
Preocupación
De acuerdo a una encuesta realizada por el instituto Datafolha publicada el pasado 12 de junio, el 36 por ciento de los brasileños asegura que las intervenciones de Janja perjudican al gobierno de Lula da Silva, mientras que solo el 14 por ciento siente que lo ayudan.
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