El azúcar se ha convertido en un elemento central en la dieta de los chilenos. Golosinas, helados, y bebidas presentan un importante contenido de este alimento, que si bien es necesario para nuestra nutrición, es muy importante evitar el exceso.
De acuerdo con un informe de la Encuesta Nacional de Salud de Chile (2016-2017), un 12,3% de la población podría padecer Diabetes Mellitus, lo que implica un incremento del 3,3% en relación al reporte anterior de 2009-2010.
La diabetes mellitus (DM) es un conjunto de trastornos metabólicos, debido a un elevado nivel de glucosa en la sangre de manera persistente o crónica. Se asocia con la aparición de complicaciones en muchos sistemas orgánicos, como la visión, los riñones, los vasos sanguíneos, el corazón, el cerebro e incluso los intestinos que se pueden ver afectados.
La principal forma de prevención, es adoptar una alimentación saludable, con una dieta sana, con pocos alimentos refinados y realizar ejercicio regularmente, sobre todo para aquellas personas con una predisposición genética a este tipo de enfermedades.
CONSEJOS
Lo primero que hay que tener en cuenta, es que no se puede eliminar completamente el azúcar de la dieta. Ya que es una de las principales fuentes de energía para nuestro organismo. Lo que se debe evitar es el uso excesivo de sacarosa o “azúcar de mesa”.
También es sumamente importante controlar la cantidad de azúcar y alimentos dulces, principalmente los que no son de origen natural, que consumen los niños. La guía de alimentación del niño(a) menor de 2 años y hasta la adolescencia del Ministerio de Salud de Chile sugiere no adicionar azúcar a las preparaciones que se le ofrece a los más pequeños.
Por otra parte, la hiperactividad en los niños tiende a asociarse al consumo de azúcar o edulcorantes en la vida cotidiana, pero diversos estudios han evaluado esta relación sin resultados que verifiquen que afecta su comportamiento. El azúcar al igual que algunas drogas, actúa a nivel del sistema nervioso central, provocando la liberación de dopamina en el cerebro lo que hace que sea una sustancia adictiva.