Las Fiestas Patrias ya llegaron en un septiembre que trae mucha alegría a todos los chilenos. Entre cuecas y trajes de huaso, también hay comidas típicas que jamás deberían faltar en una mesa dieciochera. De acuerdo a algunos estudios de años anteriores, una persona sube entre 2 y 3 kilógramos durante las celebraciones.
Este último dato tiene varias explicaciones. Una de ellas es la exquisitez de los platos que se pueden ofrecer en estas Fiestas Patrias. Entre ellas están las empanadas de pino. Son una de las grandes protagonistas. En su versión original son una masa rellena con una preparación en base de cebolla, carne de res picada o molida, aceitunas y huevo duro. A su vez, han ido mutando según los gustos y en la mesa podemos encontrarlas rellenas de mariscos, de pollo o en su versión vegetariana.
Una persona sube entre 2 y 3 kilógramos durante las celebraciones.
Por otro lado, las sopaipillas no pueden estar ausentes en las Fiestas Patrias. Se trata de una masa de harina de trigo frita en aceite o manteca de cerdo. A partir de ahí tiene sus propias versiones según la región del país en la que nos encontremos. En la zona norte y centro del país lleva zapallo y son delgadas, pero en el sur, tienen una consistencia como la del pan.
Por su parte, los anticuchos son pedazos de carne vacuna y cebollas ensartadas intercaladamente en un fierro de 40 centímetros. Se sazona con sal gruesa, asados a las brazas y se acompaña con pan marraqueta en la punta del fierro. A su vez, también tiene intercalados trozos de longaniza, chorizo, vienesas, cebolla y pimentón que se cocinan en una parrilla como las carnes.
¿Algo para tomar?
El terremoto es una bebida que tiene muchas historias alrededor sobre su origen, pero que refleja la pérdida del miedo de los chilenos a los temblores, ya que nacimos y convivimos con ellos. Si bien los ingredientes dependen del gusto de cada uno, los más conocidos son el pipeño, granadina y helado de piña. Un infaltable en estas Fiestas Patrias.