Utilizar un trapo rojo para la limpieza del hogar es un ritual surgido hace siglos, recomendado por el Feng Shui, y que ayuda a eliminar las malas energías de una casa, para de esta manera atraer la prosperidad y la buena suerte de quienes habitan el lugar.
El Feng Shui es una práctica milenaria que pone el foco en la circulación de las energías y que puede ayudar a transformar un hogar en un verdadero templo. Esto se logra, por ejemplo, acomodando objetos en determinadas posiciones, pintando paredes con colores que atraen buena suerte o colocando plantas que alejan las energías negativas.
Este color es uno de los más poderosos para eliminar energías negativas.
Además, el Feng Shui brinda recomendaciones sobre cómo limpiar una vivienda para sacar las malas vibras, y uno de los métodos más efectivos que propone es el ritual del trapo rojo. Este color es uno de los más poderosos para eliminar energías negativas y simboliza buena fortuna y la protección.
El paso a paso del ritual
- Paso 1: lo primero es conseguir un trapo rojo liso que puede ser tanto de algodón como microfibra, mientras que sea un material adecuado para la limpieza. Antes de comenzar el ritual, hay que lavarlo bien para de esa manera quitarle todas las energías no deseadas.
- Paso 2: para el Feng Shui, es importante empezar la limpieza desde la entrada principal del hogar y, desde allí, seguir por las demás habitaciones, en sentido de las agujas del reloj. Habrá que prestar especial atención en aquellos rincones oscuros o lugares desordenados.
- Paso 3: el trapo rojo se debe utilizar para limpiar muebles, vidrios y cualquier objeto de decoración, concentrándose en el propósito del ritual y repitiendo la frase: "que todas las energías negativas sean transformadas en positivas".
- Paso 4: para finalizar, es fundamental que, luego de haber terminado con la limpieza, el trapo sea lavado o incluso descartado porque puede contar con energías atrapadas allí.
Cabe señalar que el ritual del trapo rojo puede realizarse cualquier día de la semana, con la única condición de que sea en horarios de la mañana o de la tarde. No obstante, muchos expertos recomiendan hacerlo el primero o 31 de cada mes o cuando se reciba visitas que dejaron un ambiente cargado de malas vibras.