El mal humor es algo que nos ocurre a todos con frecuencia, y es una mezcla entre enfado e irritabilidad. Un estado de ánimo que nos invade repentinamente y que no siempre sabemos de qué manera manejar.
El mal humor puede ser causado por un hecho determinado que nos produce frustración, un enfado no expresado, por el miedo a lo desconocido o simplemente por el cansancio y el estrés. Cualquiera sea el caso, es imprescindible buscar la manera de combatirlo, y lograr la calma.
Aprender a controlar el mal humor no es nada fácil, pero existen algunas técnicas que nos pueden ser muy útiles, para evitar que este estado tan negativo afecte nuestro día a día; y las presentamos a continuación.
Cómo revertir el mal humor y lograr sentirnos tranquilos
Encuentra cuál es la causa y cómo se comporta tu mal humor: Detrás de cualquier momento de mal humor hay una situación a la que tenemos que poner atención. Si nos damos cuenta de cuándo aparece esta frustración o irritabilidad nos va a ser más fácil aprender a desactivarla.
Toma consciencia de tus emociones antes de quejarte: Es fácil culpar a los demás de nuestro mal día o incluso de los problemas que tenemos. Es importante que empecemos a responsabilizarnos de cómo nos sentimos. De esta manera, en vez de intentar que los demás nos solucionen la vida, vamos a poder resolverla nosotros mismos.
La respiración profunda nos ayuda a disolver el estrés.
Utiliza la respiración para hacer bajar tu mal humor: La respiración profunda y por supuesto también la meditación, nos ayuda a disolver el estrés y el mal genio que podamos ir acumulando a lo largo del día. Es una buena alternativa cuando nos sentimos desbordados por nuestra rutina.
Cambia de escenario antes de actuar: Si intentamos razonar cuando estamos de mal humor, sólo nos vamos a frustrar más aún. Para poder hablar con la gente que nos rodea, primero hemos de manejar el mal humor. Por ello, cambiar de ambiente o de lugar físico es una buena estrategia.