El paso de los años deja una huella en el cuerpo, especialmente en la piel, produciendo un envejecimiento cutáneo. Sin embargo, en este proceso natural e inevitable, hay factores que podemos manejar y así evitar que la pérdida de volumen y elasticidad, la flaccidez y arrugas aparezcan prematuramente.
Los niveles de polución de la ciudad donde vivimos, la exposición al sol, las horas que dormimos, lo que elegimos cada día para comer, son factores o estilos de vida que afectan nuestra salud y también tiene un impacto directo en la piel. El cigarrillo, el alcohol también son factores agravantes.
La buena noticia es que, cuidando los hábitos, el envejecimiento de la piel puede retrasarse, es por eso que a continuación detallamos cuáles son los factores que perjudican a la dermis, y cómo cuidarnos para evitar un daño mayor.
5 Factores que envejecen la piel
El sueño: Si no dormimos lo suficiente, nuestra piel pierde agua y se defiende peor de las agresiones de la radiación ultravioleta. Durante el sueño la piel se repara. Dormir poco de forma crónica se asocia con el aumento de los signos de envejecimiento, disminución de la barrera cutánea y peor aspecto.
La dieta: Los antioxidantes nos defienden del estrés oxidativo y tienen acción antienvejecimiento. Son las vitaminas y los micronutrientes como el zinc, el selenio o el cobalto presentes en los vegetales y en las frutas principalmente.
Si fumamos, nuestra piel parece cinco años mayor.
Tabaco: Los efectos nocivos del tabaco se conocen hace décadas. Los estudios dicen que si fumamos, nuestra piel parece cinco años mayor. La piel se arruga, se afecta a la vasculatura y se mancha. Algo similar pasa con el consumo de alcohol.
Radiación infrarroja: El infrarrojo es una radiación presente en el espectro electromagnético y que nos llega a la piel a través de la luz del sol y de forma ocasional desde los electrodomésticos. Es fundamental evitar la exposición frecuente al sol, así como también el uso de pantallas o protectores específicos cuando no se pueda evitarlo.
Polución.: La contaminación ambiental envejece la piel. Lo hace a través de dos mecanismos. Uno de ellos es cuando se combina en el exterior con la radiación solar. Para contrarrestar, es indispensable tener una rutina de limpieza facial diaria.