Todos sabemos que la base para sentirnos bien y estar saludables es llevar una dieta equilibrada. Por eso planificamos los menús semanales, cuidando de no falte ningún nutriente, y para esto, lo más recomendable, es acudir a los superalimentos.
Los superalimentos están adquiriendo cada vez mayor importancia a nivel mundial, y esto gracias a los múltiples beneficios para la salud que ofrecen. Se trata de alimentos muy completos y con alto valor nutricional.
Aportan gran cantidad de vitaminas, son antioxidantes, ricos en nutrientes. Por todo lo dicho anteriormente, en la última década se ha producido un aumento constante de la oferta de superalimentos en el mercado, y a continuación dejamos una lista de los más beneficiosos, y además, los más fáciles de conseguir.
Los superalimentos que no te pueden faltar
Alimentos fermentados: los alimentos fermentados, como el yogur y el kimchi, ocupan uno de los primeros puestos de los superalimentos gracias a los beneficios que ofrece tanto el sistema inmunitario como al digestivo. Y es que, según han comprobado en varios estudios, una dieta rica en alimentos fermentados aumenta la diversidad del microbioma y mejora las respuestas inmunitarias.
Frutos rojos: frutos rojos, como los arándanos o la grosella, son una excelente fuente de antioxidantes que ayudan a proteger las células contra el daño de los radicales libres. Además, los antioxidantes son importantes para el crecimiento del cabello, así como para mantener las uñas fuertes y una piel sana.
Semillas de chía: las semillas de chía están repletas de antioxidantes, minerales, fibra y ácidos grasos omega 3. Estas semillas también son una gran fuente de calcio, fósforo y magnesio, fundamentales para la salud de los huesos.
Acai: este año ha aparecido un nuevo superalimento, el acai. Un ingrediente que se ha hecho muy popular en ‘bowls’ y batidos saludables, ya que no solo previene el envejecimiento cerebral, sino también el colesterol.
Los aguacates están cargados de antioxidantes y otros nutrientes.
Aguacate: se trata de uno de los superalimentos más preciados. Además de su adorado sabor y de ser una excelente fuente de grasas saludables, los aguacates están cargados de antioxidantes y otros nutrientes que mejoran el colesterol, la densidad ósea, el cuidado de la piel y la salud de los ojos.
Frutos secos: los frutos secos son una excelente forma de añadir proteínas, fibra y otros nutrientes clave a la dieta, razón por la cual están considerados unos magníficos superalimentos.
Pescado azul: el pescado graso, como las anchoas, las sardinas, el arenque y el salmón, son una excelente fuente de ácidos grasos y omega 3, un antiinflamatorio esencial, y una rica fuente de proteínas, vitaminas y minerales.
Granos antiguos: este término engloba varios tipos de granos que han permanecido inalterados durante miles de años, considerados por ser una gran fuente de vitaminas y aminoácidos esenciales. Por ejemplo, la quinoa, la espelta, el bulgur, el centeno o el trigo sarraceno.
Algas marinas: las algas, como la espirulina o el kelp, están repletas de minerales y son una de las mejores fuentes naturales de yodo, necesario para producir la hormona tiroidea, magnesio, hierro, calcio, vitamina C y potasio.