El rodaje de “Red One” fue unan calamidad. Ryan Reynolds y Dwayne Johnson comparten protagonismo en una película de acción que debería haberse estrenado a finales del año pasado, pero la huelga en Hollywood pateó el estreno para noviembre de este año.
De acuerdo a lo que se ha publicado en “The Wrap”, los extraños hábitos de Dwayne Johnson también hicieron su parte para que la película se retrasara. Es que, especialmente una de estas costumbres, lo distanció por completo de su coestrella, Ryan Reynolds.
Las fuentes del medio indican que a Dwayne Johnson le importaba poco y nada llegar tarde al set. Incluso, se dice que el equipo tenía que esperarlo por ocho horas en algunas ocasiones. Esto retrasó el cronograma en más de una oportunidad y aumentó los costos de producción en millones de dólares.
Se dice que el equipo tenía que esperarlo por ocho horas en algunas ocasiones.
Otro de los problemas se dio porque Dwayne Johnson tiene la curiosa costumbre de orinar en una botella Voss fuera de su caravana y dejarla ahí para que su asistente personal la deseche. Cabe destacar que “Alerta Roja”, la primera película de la franquicia, tuvo problemas similares en su producción.
Una gran pelea
Fue Ryan Reynolds quien confrontó a la estrella de “Jumanji” por sus tardanzas. Esto llevó a que se produjera un distanciamiento entre ambos y no se dirigieran la palabra durante años. Aunque se dice que estos informes podrían ser exagerados, ya que no impidió que sigan trabajando juntos después de “Alerta Roja”.
De acuerdo a lo que sostiene el mencionado medio, Dwayne Johnson llega tarde debido a que se niega a trabajar por días enteros, tal como se acostumbra en algunas producciones, por lo que suele dedicarle no más de ocho horas a los días de grabación.
Si te gustó nuestro contenido, puedes seguirnos en Google News y en nuestro Canal de WhatsApp, eso nos ayuda a seguir generando contenido gratuito a nuestros lectores. ¡Muchas gracias!