La llegada del invierno provoca que la rutina del día a día en casa cambie por completo. Asimismo, hay que saber cómo preparar el hogar para la llegada de las primeras heladas de la temporada, que han empezado a golpear la puerta de los chilenos en los últimos días.
Uno de los trucos caseros más conocidos es poner sal cerca de las aberturas de las ventanas para proteger los vidrios del frío. Uno de los problemas del invierno es la condensación, que se da cuando las ventanas se cubren de diminutas botas de agua.
Solo un cuenco con sal en el marco puede ser muy útil. Esto debido a que este ingrediente de cocina que todos tenemos en casa baja el punto de congelación del agua, lo que significa que puede ayudar a que se forme hielo en las superficies.
De este modo, se evita la acumulación de escarcha durante el invierno, algo importante si hay filtraciones o condensación del aire dentro de la casa. “La acumulación constante de condensación en el hogar no es buena y, en algunos casos, puede causar crecimiento de moho, lo cual puede ser peligroso para tu familia”, se dice desde el medio británico “Posh”.
“La acumulación constante de condensación en el hogar no es buena".
Consejos
Para este truco de invierno, la sal puede ser gruesa o fina. A su vez, el tamaño del recipiente tiene que ser acorde al de la ventana, cuanto más grande sea, más sal se necesitará. El cuenco de sal debería durar al menos un par de días, dejarlo demasiado podría cargar el ambiente de humedad.
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