En tiempos de redes sociales, las comparaciones entre la vida que llevamos con la de los demás se hacen cada vez más habituales. Es por este motivo que los expertos han desarrollado una guía para que este hecho común en las plataformas digitales no termine afectando nuestra salud mental.
Una de las primeras recomendaciones es no idealizar la vida de los demás. Es importante marcar que lo que se enseña no es toda la historia. La felicidad ajena en redes sociales no implica que no existan dificultades. Nadie sube fotos de discusiones o malos momentos.
Otra cuestión importante es hacer de vez en cuando una limpieza digital. Es vital dejar de seguir a las cuentas que te hacen sentir mal. Vale buscar contenido inspirador y busca cuentas que de verdad aporten a tu día a día.
Otra cuestión importante es hacer de vez en cuando una limpieza digital.
Un punto a tener en cuenta es ser consciente del scroll automático. Si estas en un momento triste o aburrido, quizás las redes sociales no sean el mejor lugar para estar y refugiarte. Por lo cual, es importante adaptar técnicas de regulación en el uso de, por ejemplo, Instagram, y limitar su uso.
Compartir verdad
Además de buscar inspiración en el mundo digital, también debemos ser sinceros y buscar compartir imágenes en donde salgamos naturales y normales. No es subir desgracias, pero sí intentar ser más realista y tener un vínculo sano con las redes sociales.
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