Pasar largas horas sentado en la oficina es una realidad común para muchos trabajadores. Sin embargo, este hábito puede tener serias consecuencias para la salud. La solución puede estar en una práctica de ejercicios emergente conocida como "sentarse de manera activa".
El sentarse de manera activa es una técnica que busca contrarrestar los efectos negativos de estar sentado por períodos prolongados. Esta práctica implica incorporar pausas regulares para caminar, estirarse y realizar ejercicios de baja intensidad durante la jornada laboral.
Estos cambios no solo ayudan a fortalecer los músculos abdominales y reducir el estrés en la espalda, sino que también contribuyen a mantener una buena condición física y mental. Sentarse de manera activa se trata de interrumpir los periodos de inactividad con actividades físicas ligeras. En lugar de permanecer en la misma postura durante horas, se recomienda variar la posición, caminar, estirarse y realizar pequeños ejercicios de oficina.
Estas acciones pueden mejorar tanto la salud física como la mental, proporcionando momentos de desconexión y recarga de energía. Puedes comenzar con estiramientos, para los flexores de cadera y muñecas, también con ejercicios cardiovasculares, como moverte por el salón o subir y bajar escaleras.
No descuides tu físico.
Además, puedes respaldarte en estudios recientes que han demostrado que los descansos regulares mejoran el estado de ánimo y reducen la fatiga entre los trabajadores, sin afectar la productividad ni el rendimiento cognitivo.
Más actividades
Sin embargo, puedes hacer otras actividades en tu jornada de trabajo, como movimientos abdominales, sentadillas o hasta flexiones si tienes el espacio disponible.
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